Reflexiones sobre el cierre de Google Reader

La semana pasada saltaba la noticia de que Google ha decidido cerrar su servicio de subscripción a feeds Google Reader. En seguida surgieron infinidad de reacciones y especulaciones sobre el tema. Algunas fuentes apuntan a que la culpa reside en Google +, el enésimo y fallido intento de Google por llevarse su trozo de la tarta de las redes sociales. Es una explicación que podemos asumir como cierta, ya que no en vano Google rediseñó la interfaz de muchos de sus servicios según el estilo de su red social, empezando por el propio Reader (lo que por cierto provocó más de una queja).

Más allá de las razones de Google para prescindir de su lector de feeds, la noticia me ha hecho reflexionar sobre la forma en que está evolucionando nuestra manera de recibir información en Internet. Y aunque no soy tan dramático como Loretahur cuando habla de la “muerte del RSS”, sí que comparto su opinión de que las grandes plataformas están apostando por la exclusividad en detrimento de la interoperabilidad que supone el RSS.

Yo mismo me he dado cuenta de que en mi página de inicio de Google Reader aparecen menos elementos nuevos al día que cuando comencé a usarlo. (Será que los blogs ya no molan y la gente no los actualiza, o quizá como ahora no están de moda es cuando molan.) En cambio, las redes sociales, en mi caso Twitter, se han convertido en fuente habitual de información. Hay muchos blogs de los que sé que hay nuevos artículos por las notificaciones de sus autores en Twitter o en las páginas o grupos de Facebook. De hecho, hay algunos a los que ni siquiera estoy suscrito a sus feeds. Y para qué negarlo, yo también me esfuerzo en difundir mis nuevas entradas (y las de los blogs en los que colaboro) en las redes sociales. Además, las recomendaciones de mi Timeline se han convertido en una fuente de información a la que no llegaría únicamente a través de los feeds a los que estoy suscrito.

Pero no siempre quiero seguir al autor de un blog ni enterarme de todo lo que dice. Además, aunque parezca mentira, hay gente que no tiene Twitter ni Facebook, por lo que tampoco se pueden basar las notificaciones sobre nuevos artículos exclusivamente en estas redes. El RSS es un estándar, y como tal permite utilizarlo con independencia de la plataforma o el dispositivo utilizado: Windows, Mac, nube, escritorio, móvil, tablet, PC…

Confío en que Google + no suponga la muerte de los feeds, aunque su cierre les afectará irremediablemente. Mi intuición me dice que la interoperabilidad se mantendrá debido a las múltiples plataformas que existen a día de hoy, de la misma manera que en su día Internet fue un salvavidas para la pervivencia de Apple. Y para los que no queráis renunciar a vuestas suscripciones, la misma Loretahur ya ha hecho los deberes y nos ofrece varias alternativas a Google Reader. Yo ya les estoy echando un vistazo para cuando llegue el momento de la migración 😉

Comentamos ‘Summer Wars’ en El Ninho Naranja

Normalmente mis colaboraciones con El Ninho Naranja suelen ser reseñas de libros o la crítica de algún estreno reciente. Este vez me adentro en la sección de [Re]Estrenos del blog para comentar una cinta de animación japonesa (lo sé, últimamente estoy muy japo) estrenada en 2009. Se trata de ‘Summer Wars’, del animador Mamoru Hosoda, quien ya se ganase el favor de crítica y público con su primer trabajo «en solitario» titulado ‘La chica que saltaba a través del tiempo’.

‘Summer Wars’ es una historia en la que se combinan los elementos títpicos del shonen con una aventura contrarreloj en la que una malvada inteligencia artificial amenaza las vidas de los protagonistas así como la estabilidad de un mundo virtual llamado Oz.

Podéis leer la reseña completa pinchando en la imagen.

Summer Wars

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Guía para conocer la aplicación Buffer

Compartir contenidos en las redes sociales está a la orden del día, no hace falta ser un gurú de las nuevas tecnologías para darse cuenta. Y las aplicaciones que permiten compartir esos contenidos de forma fácil pueden resultar especialmente atractivas para dispositivos móviles, puesto que en ellos es más farragoso copiar enlaces desde el navegador para pegarlos manualmente en nuestras actualizaciones de estado.

La aplicación Buffer permite publicar la información que queramos, desde páginas web a tuits ingeniosos, en las redes sociales donde tengamos perfil. La diferencia es que esos contenidos pueden aparecer de forma instantánea o bien podemos “almacenarlos en el buffer” y dosificarlos a lo largo del día. Esta característica es muy útil para los que dedican momentos concretos del día a leer blogs o mirar la prensa online pero en cambio no quieren saturar de pronto su Timeline de Twitter o su muro de Facebook con enlaces a noticias y artículos.

Cómo funciona

Se puede acceder a través de su página web, desde la que podemos controlar el panel de control y la totalidad de las funcionalidades. También tiene aplicación para Android y iPhone/iPad y se pueden instalar extensiones de Buffer en los navegadores Firefox, Chrome y Safari. En ese sentido se parece mucho a utilidades como Pocket.

La versión gratuita de Buffer permite conectar un perfil de cada una de estas redes sociales: Twitter, Facebook, LinkedIn y App.net. También permite conectar una página de Facebook o un grupo de LinkedIn, pero sólo si no hay conectados perfiles personales en estas redes. La versión de pago, llamada versión awesome, cuesta 10€ al mes, y elimina estas restricciones y con ella se pueden conectar hasta un máximo de 12 perfiles de las 4 redes en cualquier combinación (varias cuentas de Twitter, perfiles y páginas de Facebook…). También se elimina el tope de posts almacenados en el buffer, que en la versión gratuita son 10. Este tope de contenidos no suele ser un problema, ya que conforme se vayan publicando iremos vaciando la “cola”.

Conexión de cuentas

Para utilizar Buffer podemos acceder a través de Twitter o Facebook, o bien crearnos una cuenta al efecto. Una vez dados de alta, podemos conectar nuestros perfiles de redes sociales atendiendo a las limitaciones (o no) de nuestra versión. Lo ideal es hacerlo desde el panel de control de la web. Podemos establecer cualquiera de nuestros perfiles, o incluso varios a la vez, como “default”, que es en el que se compartirán por defecto los contenidos, aunque siempre podremos seleccionar dónde queremos publicar cada post.

Cuentas conectadas en Buffer

El Tahúr en versión avatar, casual y formal

Publicar contenidos

Una vez hemos conectado nuestros perfiles, podemos empezar a compartir contenidos. Existen multitud de formas. Desde el móvil, si seleccionamos la opción de ‘Compartir’, nos aparecerá la posibilidad de ‘Añadir a Buffer’. La extensión para navegadores añade un botón (en Firefox está a la derecha de la barra de navegación) que permite añadir a Buffer la página en la que estemos. Con el plug-in, además, cuando naveguemos por las webs de Twitter o Facebook nos aparecerá un nuevo botón de color verde cuando vayamos a compartir contenido (escribir un tweet, retuitear, compartir en Facebook). Por último, desde la web de Buffer podemos añadir manualmente un post.

Publicar en Buffer

Retuiteando algo al azar…

Cuando añadamos un contenido a Buffer nos aparecerá un cuadro de diálogo como el de la imagen. Podremos modificar el texto del post y seleccionar las redes sociales en las que queramos publicar el contenido. Disponemos además de la opción de publicarlo en el momento o añadirla a la cola de espera, en cuyo caso se publicará automáticamente de acuerdo a nuestra programación (ver más adelante).

Por cierto, en el caso de que nuestro navegador (móvil o de escritorio) nos suponga un impedimento para compartir directamente en Buffer, este post de Blogoff explica cómo saltarse la restricción mediante el truco de enviar por e-mail el contenido.

Una característica interesante de Buffer es que genera estadísticas de los contenidos que publiquemos a través de la aplicación, como las veces que se ha vuelto a compartir (retweets o compartir en Facebook), el alcance potencial en función de nuestros seguidores y los seguidores de la gente que haya distribuido el contenido, los favs o ‘Me gusta’ que ha recibido, o si hemos incluido un enlace, cuántas veces han pinchado en él.

Programar la publicación

A diferencia de otras aplicaciones como Tweet Deck, en las que cada tuit se puede programar manualmente, en Buffer hay que fijar de antemano los horarios de publicación para cada red social. Esto puede resultar un poco tedioso al principio, pero una vez lo tengamos completado podremos olvidarnos de programar la hora a la que queremos publicar cada contenido. Quizá lo peor sea tener que programar los horarios para cada uno de nuestros perfiles. Al fin y al cabo, es normal hasta cierto punto, ya que Buffer te permite controlar cada red de forma individual en vez de publicar en lote. Por otra parte, si programamos horas diferentes de publicación para cada red social evitaremos dar la impresión de que publicamos indiscriminadamente en todos nuestros perfiles.

Progamar posts en Buffer

a primera hora tenemos mates, a segunda lengua…

Por defecto, los horarios de publicación son los mismos para todos los días, pero podemos personalizarlos tanto como queramos, y establecer unos tiempos diferentes para los fines de semana, por poner el ejemplo del mundo. Cuando añadamos contenidos a la cola de Buffer, irán publicándose de acuerdo a las horas que tengamos programadas a partir del momento de añadirlo, siempre que no estén ocupadas. Por ejemplo, siguiendo los horarios de la imagen, si a las 10 de la mañana añado dos contenidos a Buffer, el primero se publicará a las 12:39 y el segundo a las 14:52. Pero si la noche anterior (pasadas las 12) hubiese añadido 3 posts, entonces los que compartiese por la mañana no aparecerían hasta las 17:02 y las 19:27 respectivamente. En cualquier caso, desde el panel de control podemos ver los posts proramados y reordenarlos o eliminarlos a nuestro gusto.

Podemos añadir tantos puntos de publicación como deseemos. Tan sólo debemos recordar que no podemos exceder (en la versión gratuita) un determinado número de contenidos en la cola de espera. A medida que éstos se vayan publicando podremos añadir nuevos enlaces, tuits y demás.

En conclusión

Buffer es una buena aplicación para tener tuits y actualizaciones de Facebook o LinkedIn programadas o para poder compartir varios contenidos con un intervalo de tiempo entre uno y otro y así no saturar a tus seguidores con muchas noticias de golpe. Uno de sus puntos fuertes es el de poder controlar cada cuenta por separado, especialmente si sois como un servidor y en cada red social vuestra identidad digital es ligeramente diferente. En general la forma de compartir es sencilla y al poco de empezar a usar Buffer las funcionalidades básicas se controlan sin mayor problema.

Entre sus aspectos menos atractivos, personalmente hubiera preferido un bookmarklet (marcador) antes que una extensión, puesto que las extensiones recargan demasiado los navegadores. Además, en mi caso tuve que desactivar los atajos de teclado ya que no funcionaban bien (ignoro si fue algo puntual o es un bug de la versión para Firefox). La versión gratuita puede quedarse un poco corta al permitir sólo un perfil por red social. No hace falta ser una gran empresa para tener una página de Facebook dedicada a un blog o manejar un par de cuentas de Twitter. Aunque para un uso básico (tuits y actualizaciones de esado) es una opción estupenda.